El candidato del gobierno eslovaco de izquierda nacionalista, Peter Pellegrini, se impuso el sábado en las elecciones presidenciales del país, consolidando la influencia del primer ministro prorruso Robert Fico sobre Eslovaquia.
Pellegrini, de 48 años, subrayó que su victoria significa el apoyo a la agenda del gobierno y el rechazo a un “centro de poder opositor oportunista”, en referencia a la presidenta liberal saliente, Zuzana Caputova.
Fico, que inició su cuarto mandato el pasado octubre, ha orientado la política exterior eslovaca hacia posiciones prorrusas y ha iniciado reformas en el derecho penal y la regulación de los medios de comunicación, lo que ha suscitado preocupación por la erosión del Estado de derecho.
Pellegrini obtuvo el 53,26% de los votos, mientras que el candidato de la oposición prooccidental, Ivan Korcok, obtuvo el 46,73%, según los resultados del 99,66% de los distritos electorales.
Aunque los presidentes eslovacos tienen poderes ejecutivos limitados, pueden vetar leyes o impugnarlas ante el Tribunal Constitucional. También nombran a los jueces del Tribunal Constitucional, lo que puede influir en los conflictos políticos en torno a las reformas de Fico, que pretenden reducir las penas por corrupción.
La coalición de Fico, que incluye un partido liderado por Pellegrini, detuvo los envíos oficiales de armas de Eslovaquia a Ucrania.
Fico ha criticado lo que percibe como una injerencia occidental en el conflicto, y ha advertido del peligro de que las naciones eslavas se enzarcen en hostilidades entre sí.
Pellegrini tachó a Korcok de belicista por su apoyo a armar a Ucrania y sugirió que Korcok podría implicar a tropas eslovacas en el conflicto del país vecino, afirmación que Korcok refutó.
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