El Senado de la República aprobó este miércoles la reforma a la Ley de Amnistía, que faculta a la persona que ejerza la presidencia para conceder amnistía a individuos que proporcionen información comprobable sobre casos relevantes para el Estado mexicano. La reforma fue enviada a la Cámara de Diputados para su análisis y, en su caso, aprobación.
La ley fue aprobada con 67 votos a favor de Morena y sus aliados, y 32 votos en contra de la oposición. Esta reforma amplía las facultades del Presidente de la República para liberar directamente a reclusos, incluso aquellos que hayan sido sentenciados, a cambio de información que ayude a esclarecer delitos.
El coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, explicó que la reforma tiene como objetivo esclarecer la verdad histórica en casos relevantes, como los ocurridos en Ayotzinapa, Guerrero, en septiembre de 2014, o en Tlatlaya, Estado de México, en junio de 2014.
También mencionó otros casos, como los de Chalchihuapan, Puebla; Allende, Coahuila; San Fernando, Tamaulipas; Buenavista y Apatzingán, Michoacán, en los que se cometieron asesinatos durante gobiernos anteriores, y destacó la obligación de llegar a la verdad.
La reforma al artículo 9 de la Ley busca otorgar inmunidad a quienes proporcionen información comprobable y verificable sobre asuntos relevantes para el Estado mexicano.
La presidenta de la Comisión de Justicia, Olga Sánchez Cordero, señaló que la nación mexicana tiene heridas que no han cicatrizado y que se deben utilizar recursos extraordinarios para subsanar las violaciones a los derechos perpetradas por el Estado en casos en los que la justicia no ha avanzado.
Sin embargo, hubo críticas por parte de algunos senadores de oposición. El senador del PAN, Damián Zepeda, señaló que la iniciativa busca empoderar al poder y otorga al Presidente un poder absoluto, sin contrapesos.
Por su parte, la senadora independiente, Claudia Ruiz Massieu, precisó que la reforma es más un indulto que una amnistía.
Además, la senadora de Movimiento Ciudadano, Patricia Mercado, rechazó que la reforma contribuya al esclarecimiento de la verdad, ya que no establece condiciones como dejar las armas, no reincidir, reparar a las víctimas o participar en procesos de educación, como el Acuerdo de Paz para Colombia.
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El senador del PRD, Emilio Álvarez Icaza Longoria, denunció que la reforma va en contra de las promesas del gobierno actual de garantizar el derecho a la verdad y ayudar a las víctimas en el país. A pesar de estas críticas, el Pleno del Senado desechó una moción suspensiva presentada por el PAN y continuó con la aprobación de la reforma.
Durante una entrevista, el coordinador del PAN, Julen Rementería del Puerto, advirtió que estas reformas ponen en riesgo el orden institucional del país y otorgan un poder casi omnímodo al presidente, sin los controles judiciales necesarios.
