Suspensión de venta de alimentos en zonas con derrames de aguas negras
Tras el impacto de la tormenta tropical Ileana, la venta de alimentos ha sido suspendida únicamente en áreas afectadas por derrames de aguas negras, mientras que el resto de las actividades se reanudan con normalidad.
La Secretaría de Salud (SSA) informó que, debido a las lluvias y los desbordes de aguas negras en Los Cabos y La Paz, se ha dispuesto la suspensión temporal de la venta de alimentos en los perímetros afectados para prevenir posibles riesgos de salud. Se ha solicitado a los vendedores realizar un saneamiento básico, utilizando agua hiperclorada en sus áreas de trabajo, y mantener estrictos hábitos de higiene, como el lavado de manos y el uso de gel antibacterial.
En La Paz, la suspensión de venta de alimentos solo aplica a los negocios ubicados en las zonas con escurrimientos de aguas negras. Los propietarios de estos establecimientos deben seguir las indicaciones de los verificadores de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coepris), quienes están llevando a cabo campañas de prevención y notificando a las autoridades locales sobre cualquier problema.
El viernes pasado, la reunión del Sistema Estatal de Protección Civil, presidida por el gobernador Víctor Castro, acordó suspender eventos masivos y deportivos, así como la venta de alcohol y alimentos en la vía pública. Sin embargo, este sábado se revirtió la medida para permitir la venta de alimentos y bebidas en comercios.
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El Sistema Estatal de Protección Civil ha declarado saldo blanco y ha dado luz verde a la reactivación de actividades generales, incluyendo las celebraciones del Grito de Independencia. El regreso a clases en todos los niveles educativos está previsto para el martes 17 de septiembre, y se llevarán a cabo las festividades patrias en Palacio de Gobierno, incluyendo el Grito de Independencia, una verbena popular con antojitos mexicanos y un desfile cívico-militar.
El Sistema Estatal de Protección Civil permanecerá en sesión permanente hasta el 30 de septiembre para coordinar los preparativos del Simulacro Nacional de Protección Civil, con una hipótesis de huracán y temblor, asegurando así la preparación adecuada para futuros eventos.
La comunidad se prepara para un regreso a la normalidad, con un enfoque renovado en la seguridad y la prevención.
